La diputada del Partido Salvador de Honduras (PSH), Iroshka Elvir, enfrenta serias acusaciones de haber encubierto el acoso sexual y laboral sufrido por una funcionaria de la oficina de su esposo, el designado presidencial Salvador Nasralla.
Esta denuncia surge luego que Iroshka criticó en un programa de televisión al presidente del Congreso, Luis Redondo, acusándolo de violencia de género.
Karen Rodríguez, exdirectora del despacho de Nasralla, se pronunció en la red X, antes Twitter, reaccionando a las declaraciones de Iroshka.
Rodríguez, quien en agosto de 2022 denunció ante la Fiscalía Especial de la Mujer a Moisés Ulloa, delegado del despacho del designado presidencial, por acoso, cuestionó la integridad moral de Iroshka.
«Los diputados del PSH se callaron y ocultaron mi denuncia por amistad o por conveniencia política», acusó Rodríguez, alegando una defensa selectiva y oportunista de los derechos de la mujer por parte del partido.
Para respaldar sus acusaciones, Rodríguez publicó un chat donde contactó a Iroshka, el 8 de agosto de 2022, proporcionándole pruebas de lo ocurrido en la oficina de Nasralla y solicitando que informara al designado sobre la denuncia.
Tras esta comunicación y la presentación de pruebas, Rodríguez fue despedida de su trabajo, un día después de haber interpuesto la denuncia.
Este incidente pone en tela de juicio no solo la integridad de Iroshka Elvir y su esposo Salvador Nasralla, sino también la del PSH en su conjunto.
La falta de respuesta o solidaridad por parte de los miembros del PSH hacia Karen Rodríguez, tras su denuncia y su posterior despido, refuerza la percepción de un posible encubrimiento y una actitud selectiva hacia los derechos de la mujer dentro del partido.