Excolaborador de Jorge Cálix habla de su verdadera personalidad: «Me sentí asustado…era primera vez que estaba ante alguien así»



El abogado Ricardo Soto, antiguo colaborador de Jorge Cálix en sus campañas políticas, ha realizado una impactante declaración, describiendo la «verdadera cara» del diputado.

Soto describe a Cálix como un individuo «desquiciado y psicópata», capaz de cualquier artimaña para alcanzar sus objetivos, relatando una serie de acciones turbias en las que supuestamente estuvo involucrado.

El relato de Soto pinta a Cálix como un manipulador sin escrúpulos, que no dudaba en recurrir al fraude electoral y a alianzas oscuras para alcanzar sus metas políticas. Además, revela su lado más oscuro al describir su habilidad para urdir engaños.

La denuncia pública de Soto no solo evidencia su decepción por haber creído en Cálix, sino que también alerta a la población sobre la verdadera naturaleza del político.

Al final, Soto insta a la ciudadanía a no dejarse engañar por la fachada de líder de Cálix, advirtiendo sobre su verdadera intención de dividir y destruir.

A continuación la declaración íntegra de Ricardo Soto:

Quiero comenzar por decir que yo no conocía al verdadero Jorge Cálix antes de 2016-2017, solo conocía al Cálix de la TV, un buen actor por cierto.

Lo conocí cuando me lo presentaron en la Universidad, lo vi joven, supe que se lanzaba y fue cuando invité a varios amigos a que lo apoyáramos. Le hicimos su campaña, sin saber que luego pasaría gran vergüenza por esa decisión de haberles recomendado andar con ese individuo.

En lo personal, nunca tuve nada contra él, pero como político lo vi actuar siempre como un auténtico cachureco. En la campaña de 2017, cuando lo acompañé, lo vimos pactar bolsitas solidarias con David Chávez, mandaba a traerlas a un local ubicado detrás del restaurante SENROS.

Lo vimos pactar publicidad regalada por Lena Gutiérrez. Él pidió enviar a una casa una USB, la casa era de Lena Gutiérrez, a los días, de esa casa mandaron a dejarle cientos de rótulos de propaganda con su cara.

Lo vimos obtener el financiamiento a su candidatura por parte de Ficohsa.

El Jorge que conocí, mentía permanentemente, falsificó credenciales para asambleas, que son documentos del partido, tras una pelea que tuvo con Arcadia Gómez (QEPD).

Lo vimos planificar fraudes electorales, lo hacía descaradamente, se sentaba con algunos dirigentes a proponerles hacer fraude. Recuerdo le decían “usted no ocupa hacer eso abogado” y él reprochaba que necesitaba salir como el más votado.

Un día, de su propia boca nos dijo que tenía relaciones cercanas a maras y pandillas, hasta nos señaló con el dedo al marero a quien le entregó unas credenciales para estar en mesa.

Lo vimos golpearse por sí solo un día, y fingir ante el público que había sido un accidente de carro, a pesar de que el carro estaba intacto. Se fue a la cima de un cerro, se tiró al piso y comenzó a posar para la foto con los ojos cerrados, luego salió con un collarín en el pescuezo para poder evitar asistir a una votación.

Lo vimos cuando lo denunciaban de fraude algunos candidatos a diputados del mismo partido que lo cacharon, porque como repito, su cualidad de ser descarado hizo que todos se dieran cuenta que infló votos.

Y él, para callar a los que lo denunciaban, lo que hizo fue falsificar actas en las que adulteró el resultado de los que lo denunciaban, y luego se fue a los medios a decir «miren estos que me denuncian también salen adulterados».

No olvido sus palabras de un día: «yo solo ocupo ganar las internas y luego a mí me vale verg… libre, en las generales salgo por que salgo».

Nos lo dijo en su vehículo, una Nissan paila verde que tenía, mientras estábamos esperando iniciar una reunión en una casa ubicada al final del Bulevard Morazán, cerca de Tigo.

Cuando vi todo eso, descubrí al verdadero Jorge Cálix.

Confieso que me sentí asustado de ver una persona tan desquiciada y psicópata, era primera vez que estaba ante alguien así.

Nos decía «chicos no se asusten, así es la política».

Me disculpé con mis amigos al ver dónde habíamos caído. La única opción que vi posible en ese momento fue separarme y denunciarlo públicamente. Pero cuando lo denuncié, me insultaron algunos de sus seguidores.

No creían, estaban como yo estuve un día, con la idea del Cálix, pero el actor de la TV, y hasta diputados me llamaron para preguntarme qué pasaba.

Entendí en aquel momento que no sería yo quien convencería a la gente de quién era realmente este individuo, dejé que la vida y el destino demostraran su verdadero ser.

Y así, el día de la traición llegó. A espaldas del pueblo y del partido, se alió con cachurecos y golpistas para usurpar el Congreso; y tras un incidente con una joven hoy lanza su candidatura, culpando a otros de sus propias acciones.

Jorge no apunta a ganar, sino a dividir y destruir. Su estrategia tiene como triunfo su propia derrota, y causar el mayor daño posible. Alerto a Libre nuevamente, no se dejen engañar del Jorge que se disfraza de líder, pendientes del verdadero Jorge, un cachureco despiadado. Nos vemos en las urnas.