¡Desenmascarado en Vivo! Raúl Valladares pone contra las cuerdas a diputado en foro televisivo



En un episodio revelador, el periodista Raúl Valladares dejó en evidencia al diputado del Partido Liberal, Marlon Lara, durante un foro televisivo sobre la elección de las nuevas autoridades del Ministerio Público.

Mientras el Partido Liberal se jacta de formar un bloque «noble» con el Partido Nacional y el PSH para elegir al Fiscal General, uno no puede evitar cuestionar sus verdaderas intenciones.

A muchos no les queda duda de que este bloque busca únicamente perpetuar su dominio sobre el sistema de justicia y blindarse contra posibles investigaciones de los escándalos de corrupción en los que se han visto envueltos en el pasado.

Lara, en un intento por lavar la imagen de su partido, aseguró en televisión que la intención de esta alianza es seleccionar a un Fiscal General que luche enérgicamente contra la corrupción, la impunidad y el crimen organizado. Pero la realidad es que sus palabras sonaron huecas y carentes de sinceridad.

Raúl Valladares no se dejó engañar por la retórica del diputado. Con preguntas punzantes y directas, cuestionó: «¿De los que van a votar cuántos son corruptos ahí en el Congreso? ¿Cuántos han agarrado dinero? ¿Cuántos a lo largo de muchos años han tenido muchos clavos? ¿Cuántos están en la lista que dejó la MACCIH?».

Y, con una perspicacia que desnudó al diputado, añadió: «Y ellos van a votar…nadie va a votar para que lo metan preso, esa es la realidad de Honduras y de ese Congreso».

Sin pelos en la lengua, Valladares concluyó: «Hay que ser honestos, muchos simplemente votarán por el fiscal que consideran menos peligroso para sus intereses». Las palabras del periodista dejaron al diputado Lara completamente desarmado y sin respuestas.

Es vital que los ciudadanos hondureños estén alerta y exijan transparencia y justicia. El pueblo hondureño no puede permitir que aquellos con posibles agendas ocultas decidan el destino de la justicia en el país. La actuación de Lara en el programa es un recordatorio de que hay mucho trabajo por hacer para limpiar la política hondureña.